Las bolitas de pelusa pueden ser molestas, pero la buena noticia es que tienen solución. Aquí tienes 5 métodos sencillos que funcionan (¡sí, los hemos probado!):
1. Deslice suavemente una afeitadora de telas o un desbolitador sobre la superficie.
2. Intente usar cinta adhesiva o un rodillo quitapelusas para levantar la pelusa.
3. Recortar manualmente con tijeras pequeñas.
4. Frote suavemente con papel de lija fino o una piedra pómez.
5. Lavar a mano o limpiar en seco, luego ventilar en un espacio ventilado.
Si tu abrigo de lana está formando bolitas, ¡no te preocupes! A todos nos pasa, incluso con los mejores abrigos. Podemos dejarlo como nuevo.

1. Deslice suavemente una afeitadora de telas o un desbolitador sobre la superficie.
Empecemos con la solución definitiva, la más rápida y eficaz: el deshilachador de telas (también llamado quitapelusas). Estos pequeños aparatos están diseñados específicamente para este problema y hacen maravillas. Simplemente pásalo suavemente sobre las zonas con pelusas y listo: lana suave y limpia de nuevo.
Tres consejos al utilizar una afeitadora:
Coloque el abrigo sobre una mesa o cama, asegurándose de no tirar ni estirar.
Siempre siga la dirección de la fibra, no de un lado a otro. Esto evita dañar las fibras.
Sea cuidadoso, de lo contrario presionar demasiado fuerte podría adelgazar la tela o incluso rasgarla.
Y oye, si no tienes una afeitadora de tela a mano, una recortadora de barba eléctrica limpia puede resolver el problema en caso de apuro.
2. Intente usar cinta adhesiva o un rodillo quitapelusas para levantar la pelusa.
¿No tienes herramientas especiales? ¡Prueba este método ingenioso y sencillo! No hay problema. Todos tenemos cinta adhesiva en casa. Este método es facilísimo y sorprendentemente efectivo para eliminar pelusas y pelusas ligeras.
El truco de la cinta ancha: toma un trozo de cinta ancha (como cinta de enmascarar o cinta de pintor, pero evita la cinta de embalaje muy adhesiva), envuélvela alrededor de tu mano con el lado adhesivo hacia afuera y luego aplícala suavemente sobre las zonas apelmazadas.
Rodillo quitapelusas: Son perfectos para el mantenimiento diario. Con solo pasarlos unas cuantas veces, las bolitas se desprenden fácilmente.
Solo un aviso: evite las cintas muy pegajosas que podrían dejar residuos o dañar telas delicadas.
3.Recortar manualmente con tijeras pequeñas.
Si tu pelaje solo tiene algunas pelusas, recortarlo a mano funciona de maravilla y es mejor para zonas pequeñas. Es un poco más laborioso, pero es muy preciso.
Cómo hacerlo:
Coloque su abrigo sobre una mesa o superficie lisa.
Utilice tijeras pequeñas y afiladas. Tenga en cuenta que las tijeras para cejas o las tijeras para uñas funcionan mejor.
Corta solo la pastilla, no la tela que está debajo. No tires de la pelusa; solo córtala con cuidado.
Es una tarea que requiere mucho tiempo para áreas más grandes, pero es ideal si desea un acabado impecable o solo necesita retocar ciertas áreas.

4. Frote suavemente con papel de lija fino o una piedra pómez.
Bueno, puede que esto suene raro, ¡pero funciona! Una lija de grano fino (600 o superior) o una piedra pómez de belleza (como las que se usan para alisar los pies o las uñas) pueden eliminar las bolitas sin dañar tu abrigo de lana.
Cómo usarlo:
Frote suavemente sobre el área afectada, como si estuviera puliendo una superficie.
¡No presiones fuerte! Lo que buscas es pulir suavemente la pelusa, no frotar la tela.
Siempre prueba primero en un lugar oculto, solo para estar seguro.
Este método funciona especialmente bien con píldoras duras y rebeldes que simplemente no se mueven con cinta o un rodillo.
5. Lavar a mano o limpiar en seco, luego ventilar en un espacio ventilado.
Seamos sinceros. ¡La prevención es clave! Muchas veces se forman bolitas debido a la forma en que lavamos y guardamos nuestros abrigos. La lana es delicada, y tratarla bien desde el principio nos ahorra mucho trabajo de limpieza después.
Cómo cuidar adecuadamente tu abrigo de lana:
Nunca laves a máquina, especialmente las prendas delicadas: la lana se encoge y se deforma fácilmente. Lávala a mano con agua fría y un detergente apto para lana, o mejor aún, llévala a una tintorería profesional.
Secar en superficie plana: Colgar un abrigo de lana húmedo lo estirará. Colócalo sobre una toalla y dale forma mientras se seca.
Evita colgarlo mucho tiempo: Suena raro, pero los abrigos de lana no deberían estar colgados durante meses. Los hombros pueden estirarse y empezar a formar bolitas. Dóblalo bien y guárdalo en una superficie plana.
Use bolsas transpirables para ropa: El plástico retiene la humedad, lo que puede causar moho. Elija bolsas de almacenamiento de algodón o malla para proteger del polvo y permitir la circulación del aire.
En conclusión
Los abrigos de lana son una inversión, porque lucen increíbles, se sienten lujosos y nos abrigan todo el invierno. Pero sí, requieren un poco de cuidado. Unas cuantas pelusas no significan que tu abrigo esté arruinado, solo significa que es hora de una renovación rápida.
Nos gusta pensar que es como cuidar la piel de tu ropa; después de todo, un poco de mantenimiento ayuda mucho. Ya sea que uses un rodillo quitapelusas antes de salir o que lo limpies a fondo antes de guardarlo para la temporada, estos pequeños hábitos mantienen tu abrigo de lana impecable año tras año.
Créenos, una vez que pruebes estos consejos, nunca volverás a ver el pilling con los mismos ojos. ¡Feliz cuidado del pelaje!
Hora de publicación: 13 de junio de 2025